Esta es la imagen más habitual de mi abuela. Arregladita, y en su sillón, viendo la tele, o cosiendo.
Felicidades, yaya.
Miau! Para el 30 cumpleaños de mi ama todo el mundo se lo curró muchísimo, y por eso ella está tan tan feliz... En el trabajo, todas nuestras niñas queridas le hicieron cosas bonitas. Para la fiesta, tejieron banderitas de corazones, que adornaron el bar y que ahora se quedarán adornando nuestra casa (no pongo la foto porque es la misma que ya subió Laura el otro día)...
Decid lo que queráis, que aunque si, realmente no es que sean unos posavasos muy útiles porque traspasan... son lo más.
...Me lo regaló Laura ^^.
Es muy cómodo y calentito. Es super ancho y lleva una capucha muy grande para que no se enfríen las orejas al dormir (¡es un vicio!).
La capucha tiene forma de pico. Antes tenía un pompom en la punta... ¡pero se ha ido deshaciendo en las lavadoras!
Uno de mis regalos de cumple fue este precioso estuche hecho por Sira, venía vacío y poco a poco lo voy llenando.
Mi amigo invisible me regaló esta monada, gràcies Sandra!
Pues nada...... a ver si me pongo al mismo nivel pero lo tengo difícil. Gracias niñas!
Creo que cuando le puse nombre a este amigurumi estaba en un momento de esquizofrenia o bipolaridad, o algo. Así que al final, cual cualquier telenovela venezolana, mi pequeña conejita tiene tres nombres. Por suerte es muy buena y no se queja.
Tachán!
Cuando empecé a hacer a Otosan, tenía muy claro que quería que tuviera familia. Una señora esposa y dos nenes (y perro... ya veremos). Problema: que empecé a ver cosas que me apetecían más hacer y quería adentrarme más en el mundo del ganchillo. (Se podría decir que me disperso con mucha facilidad...)
Otosan.
Por si alguien quiere hacerlo:
Y este es otro de esos proyectos que tenía empezados desde hacía eones (igual unos tres meses...) y que por fiiiin he podido terminar.
Foto de Little Rita
